Alimentos funcionales: Nueva onda
María Cisneros [email protected] | Martes 23 julio, 2013
Oportunidades ante hábitos de consumo
Alimentos funcionales: Nueva onda
Para competir, empresas tendrán que desarrollar destrezas
Tips para una dieta saludable
La comida preparada es cada vez más apetecida por los consumidores, abriendo una oportunidad de negocio.
Los clientes de Musmanni Mini Súper buscan satisfacer tiempos de almuerzo, merienda y cena con soluciones prácticas y de calidad. Al introducir comida preparada, se satisface esa necesidad, explicó Gisela Sánchez, gerente de Asuntos Corporativos de FIFCO. Esteban Monge/La República
Por cierto, hoy mismo en el Club Unión, se celebra el foro de la Cámara de la Industria Alimentaria, patrocinado por el Banco Nacional y este medio, en el cual se destaca la evolución de este tipo de comida, que ahora se llama “funcional”.Entre tanto, el sector ha crecido de forma impresionante en los últimos años, sea en el mercado local, así como en el de exportación, sobre todo por el hecho de que hay más mujeres profesionales, así como familias pequeñas.
Por un lado, incursionar en la producción de la comida funcional implica riesgos, al involucrar destrezas bastante mayores que la comida simple, desde los empaques hasta el mercadeo.
Sin embargo, las tendencias del consumo favorecen a este sector.
La comida funcional está creciendo de forma impresionante en Costa Rica, al responder a la necesidad de muchos profesionales modernos, de ahorrar tiempo en la cocina.
Se trata de los bocadillos o snacks, cuya exportación se ha duplicado en tan solo un año.
Mientras tanto, las ventas de la comida preparada como tal, que sustituye un desayuno o almuerzo, así como de los combos en algunos supermercados, rondan los ¢3 mil, en casi todo el mercado nacional, lo cual representa un aumento del 20% durante los últimos dos años.
La mayor participación de la mujer en el mercado laboral, y las familias pequeñas dinamizan el crecimiento de este mercado.
Unas 2 mil mujeres adicionales obtuvieron empleo en el primer trimestre de este año, en comparación con el mismo periodo de 2012.
Del total de trabajadores, un 34% son mujeres, y la proyección para los próximos años es que su participación en el mercado laboral aumente.
Es la mujer también la responsable de tomar un 80% de las decisiones cuando se trata de compras domésticas, y si la comida preparada es una solución, hará la compra, según un estudio de Deloitte.
También cambió la estructura de las familias.
Ahora, el núcleo familiar está mayormente conformado por hasta tres personas, y ya no es necesario alimentar a varios hijos, y a los abuelos, tal como solía ser a menudo.
Para la familia pequeña, sin ningún chef permanente en la casa, la comida funcional puede ser una atractiva opción, incluso por el hecho de que la oferta ahora es variada.
Por eso, el consumo de la comida funcional es a menudo económico, dado que se ahorra tiempo, mientras se reduce el desperdicio, que puede generar cocinar para pocas personas.
Entre los productos elaborados en Costa Rica, están la pasta que solo debe introducir en el microondas, así como algo rápido como un sándwich, y hasta postres.
Mientras tanto, en el caso de los bocadillos, la tendencia es apuntar a lo natural, como las frutas deshidratadas.
En lo que al negocio de la comida funcional se refiere, se trata de dos mercados distintos.
Una gran parte de la comida preparada se comercializa en este país, mientras casi toda la producción de las bocas es destinada a los mercados externos, donde hay un alto grado de aprecio para los productos preservados tropicales.
Sin embargo, las empresas interesadas en incursionar en este sector, tienen que dominar una serie de destrezas, incluido primero el mercadeo, que le permite a la compañía saber si hay o no interés en el producto, de parte de los consumidores.
Otros factores claves en determinar el éxito o fracaso de un proyecto, incluyen la presentación del producto, así como su colocación en los puntos de venta adecuados.
Al consumidor además le atrae la novedad, así que sería importante la innovación constante.
Por su parte, la producción de los snacks, como el banano y plátano tostado, se complica por tratarse de exportar a otros mercados, incluso Estados Unidos, el cual obliga al productor a conocer los hábitos de esos consumidores internacionales.
Sin embargo, varias empresas costarricenses han tenido éxito en ambos segmentos del sector de la comida funcional, como ha sido el caso de Roma, Standard Fruit y Belca en la comida preparada, así como Jacks, Diana y Pozuelo en lo que se refiere a las bocas exportadas.
María Fernanda Cisneros
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