Algunas multinacionales que podrían instalar sus operaciones en diversas regiones del país, deberían contar no solo con las condiciones de logística que su especialidad requiera, sino con otras generales básicas como provisión de agua, manejo de desechos, electricidad, conectividad adecuada, entre otros

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Más multinacionales fuera de la GAM

Algunas multinacionales analizan las posibilidades de instalarse fuera de la Gran Área Metropolitana y el país tiene que prepararse para ello.
Por ejemplo, las empresas han puesto su mirada en sitios como Grecia, Orotina y Pérez Zeledón.
Lo hacen porque ven que podrían encontrar en esas zonas del país condiciones favorables para sus operaciones. Así lo informó este medio ayer.
Se trata de zonas francas, que además de las condiciones tradicionales que esta categoría tiene, aparentemente gozarán de un plus por instalarse fuera de la GAM. Es parte de una estrategia para lograrlo, por parte de Costa Rica.
De ese modo, esas empresas contribuirán con fuentes de empleo directo en las zonas —esperamos que buenos encadenamientos— y pueden también ayudar, en alguna medida, a la desconcentración y descongestionamiento de la GAM, que como sabemos nunca fue bien planificada para un transporte de personas fluido, eficiente y seguro.
Por el momento, es Orotina la que tuvo la iniciativa de que se analice el cantón para ver las posibilidades reales de que pueda existir ahí un núcleo logístico capaz de atraer la llegada de multinacionales a su zona.
Se está haciendo ese estudio mediante la Fundación Georgia Tech con apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo.
Pero el país debería prepararse en forma integral para este tipo de estrategias, con planes bien estructurados y viables llevados a cabo en forma coordinada entre el gobierno central y muy especialmente las autoridades locales.
Estas buenas iniciativas no deberían nunca topar a futuro con problemas como los surgidos, solo por citar un ejemplo, en Guanacaste.
En esa provincia se impulsó un desarrollo muy importante pero caótico que llevó, entre otros problemas, a la falta de agua en algunos sitios.
Las empresas y otros desarrollos ahí surgidos merecían un plan menos imprevisor. Lo merecían desde luego también los habitantes de la zona.
Hoy que se inicia una estrategia para diversificar los sitios de asentamiento de multinacionales amparadas a la ley de zonas francas, debería estar en funcionamiento un plan que garantice no solo las condiciones logísticas para el tipo de operación de cada empresa, sino también el ambiente idóneo en relación con la provisión de agua, manejo de desechos, electricidad, conectividad y otros servicios básicos generales.