Actitud positiva impulsa el liderazgo en la gerencia
| Martes 28 octubre, 2014
Actitud positiva impulsa el liderazgo en la gerencia
El supervisor debe ser el ejemplo para su implementación
Un supervisor con una mala actitud es sinónimo de un líder pobre. Esta estrategia debe ser considerada un tópico importante para gerentes, quienes deben promover el buen clima organizacional.
Además, es clave para las buenas relaciones interpersonales y laborales.
“La buena actitud es algo contagioso, es imprescindible para un buen clima laboral. Investigaciones demuestran que las personas felices incrementan notablemente su productividad. Como decimos nosotros: mejores personas, mejores resultados”, comentó Nevine Kashmiri, directora de seminarios Insight en Costa Rica.
La falta de motivación se refleja como un hábito arraigado.
Convertirse en un gran gerente no se basa en un concurso de popularidad, el hecho es que los líderes son a la vez muy queridos y respetados, debido a que tienen plena fe y confianza en sus grupos de trabajo mediante fuertes relaciones positivas.
Erradicar el pesimismo es un trabajo interno y luego una elección. Se encuentra relacionado con el nivel de autoconfianza y seguridad personal.
Para lograrlo, se debe tomar consciencia y entender las razones que motivan a reaccionar de manera negativa ante alguna persona o situación, luego evaluar cuáles podrían ser sus consecuencias negativas y finalmente elegir la mejor actitud que podemos tener ante cada una de las circunstancias.
Sin embargo, esto requiere un trabajo personal de autoconocimiento profundo.
Por esta razón, detecte si sus acciones lo están llevando a convertirse en un líder que no transmite una buena actitud hacia sus colaboradores.
Por ejemplo, si la gente se aleja de usted y no clama por su atención.
Asimismo, identifique si la mayoría de sus conversaciones e interacciones son negativas o de confrontación.
De igual forma, si no está entusiasmado con el comienzo de cada día, si se muestra una perspectiva negativa de las cosas.
Las personas con talento desean trabajar con y para los grandes líderes, pero si usted lucha con la contratación, la formación de equipos y el desarrollo de liderazgo es probable que tenga una mala actitud.
Ante esta situación, es importante un proceso de revisión para que analice sus fortalezas y debilidades, con el fin de conocer si están objetivamente evaluadas por aquellos con los que interactúa frecuentemente.
Fabiola Vargas
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@FabiVSola