Aumentan muertos y desesperación en Filipinas
Daniela Cardenas [email protected] | Miércoles 13 noviembre, 2013 12:00 a. m.

Aumentan muertos y desesperación en Filipinas
Cuatro días después del paso del tifón, escasea el agua potable, la comida y los supervivientes no encuentran cobijo, en especial en la ciudad de Tacloban, en la isla de Leyte.
Las provisiones llegan con cuentagotas a las provincias centrales de Samar, Leyte y el norte de Cebú, las más afectadas por Haiyán, aunque las agencias nacionales e internacionales han empezado a desplegarse en la zona.
Prácticamente nada de la ayuda internacional ha llegado a Tacloban, donde los cadáveres se descomponen en las calles y las autoridades temen que se declare una epidemia.
En Tacloban apenas queda en pie un 30 % de los edificios, la mayoría en situación deplorable, y hay toneladas de desperdicios por las calles después de que el tifón arrasara la localidad.
Para velar por la seguridad, hay desplegados 500 soldados y agentes y cuatro vehículos blindados Simba patrullan la ciudad.
En concreto, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) pidió $24 millones para aliviar los graves daños causados en la agricultura y la pesca.
De momento, la comunidad internacional ha ofrecido a Filipinas unos €40 millones en asistencia de emergencia, que incluye dinero, equipos médicos y de rescate y material de primeros auxilios, según el Departamento de Asuntos Exteriores filipino.
Las aportaciones proceden de una treintena de países, organizaciones internacionales y la Unión Europea (UE), que hoy anunció una ayuda adicional de 10 millones de euros para rehabilitar las zonas afectadas por el paso de Haiyan.