Congruencia entre lo que se dice y se hace es una obligación
Buena reputación corporativa posiciona a una empresa en la toma de decisión de su audiencia: Pilar Ramírez, experta
Esta opinión se puede medir de forma directa con entrevistas o data
Redacción La República [email protected] | Jueves 08 diciembre, 2022
Entender que la reputación se trabaja todos los días, desde la gestión y no desde el puesto y que inicia desde lo interno, es para Pilar Ramírez, experta en reputación empresarial, el punto de partida para que una empresa goce de una notoriedad positiva.
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Asimismo, este concepto es una red semántica, donde la marca está en el centro y se asocian conceptos o ideas de acuerdo a los estímulos que recibe una persona, por lo que desde hace tiempo dejó de ser una moda, para convertirse en una permanencia exitosa de la organización en su nicho de mercado, según la especialista en Alta Gerencia y creadora de la metodología de medición reputacional con data, que hoy es aplicada en más de 49 empresas en Colombia y Centroamérica.
“Cuando hablamos de reputación, debemos entender que esta nace a partir de las percepciones o ideas que guardamos en el hipocampo, que es donde está la memoria, ahí es donde albergamos lo que pensamos o sentimos de una marca, por lo que es primordial entender que la reputación se fundamenta en un trabajo diario y constante, que se debe cuidar y lo que debe importar es que siempre estemos en la toma de decisión de cualquier audiencia de interés nuestro”, detalló Ramírez.
De hecho, la toma de decisión no es solamente comprar, pues va más allá, es también recomendar, añorar, querer y hablar bien de una marca.
Otro factor que toma especial relevancia en la actualidad es la incursión de los canales digitales, ya que, desde estos, cualquier organización pueden tener un punto de referencia sobre cómo es valorada por su audiencia, qué aspectos positivos le reconocen, pero también cuáles le reprochan, por lo que es vital tener en cuenta estas percepciones y no restarles valor.
Sobre cuáles son los mitos más frecuentes que hay alrededor de la reputación, Ramírez enfatiza en cuatro:
- La reputación es una calificación y se basa en un puntaje. Falso, esta es muy importante, porque forma parte de una metodología, el punto medular está en el trabajo diario y en la gestión permanente a través de la escucha activa de su público interno y externo.
- Las redes sociales distorsionan un poco la reputación. Falso, cuando una compañía tiene una escucha activa, no deja escapar esos comentarios negativos, que no son tan agradables y se gestionan para mejorar.
- La reputación se puede medir una vez al año. Falso, porque el cerebro no es capaz de guardar los estímulos que recibió hace 365 días.
- La reputación es gestionada por los encargados de mercadeo o comunicación. Falso, esta debe de ser una responsabilidad de todos los miembros de la organización.
“Cuando la reputación empresarial no se maneja bien las consecuencias son claras, empezando porque al no haber un propósito claro, es imposible que el equipo humano se vincule a este y ahí empieza el primer daño”, detalló Ramírez.
Además, cuando no se gestiona de buena manera, desde afuera, las audiencias perciben a una organización como no real, al prometer cosas que no cumple y eso genera brechas reputacionales.
VALORES DE UNA ORGANIZACIÓN CON BUENA REPUTACIÓN:
- Integridad
- Coherencia en su comportamiento
- Empatía, ponerse en el lugar del otro
- Transparencia
- Innovación para adaptarse a la realidad
- Responsabilidad Social Empresarial