Caldera será la primera vía moderna
Danny Canales [email protected] | Lunes 25 enero, 2010
Ruta ofrecerá asistencia de ambulancia, grúa, mecánico y cámaras sin costo adicional
Caldera será la primera carretera moderna del país
• Recorrer los 77 kilómetros que mide la moderna vía costará ¢1.930
Danny Canales
[email protected]
La nueva carretera a Caldera, que se pondrá en operación en su totalidad este miércoles, será el primer proyecto vial de Primer Mundo que tendrá el país.
La ventaja de una vía moderna con respecto a una tradicional, es que la primera atenúa a los usuarios los dolores de cabeza que producen situaciones tan acongojantes como la de quedarse varado en medio recorrido.
Lo anterior porque inmediatamente que un conductor reporte ante la empresa que operará la carretera que su auto sufrió un desperfecto mecánico, recibirá el auxilio de una unidad de asistencia que estará disponible las 24 horas, los 365 días del año.
Incluso la ayuda podría llegarle de forma ágil aun si no tiene un teléfono móvil para solicitar apoyo, pues un sistema de vigilancia que contará con 47 cámaras a lo largo del camino registraría el vehículo varado, lo que le permitirá a la administración del camino aplicar el protocolo de asistencia.
En caso de que los técnicos de apoyo consideren que el daño del auto es mayor, entonces solicitarán una grúa para trasladar el vehículo hacia un sitio seguro mientras el conductor llama su propia grúa o a su mecánico.
De sufrir un accidente de tránsito o un quebranto de salud, el usuario de la nueva ruta dispondrá además de una ambulancia con paramédicos que dará soporte básico mientras llegan las unidades de emergencia estatales.
Algo muy importante es que el costo de estos servicios de valor agregado que se ofrecerán en el nuevo camino están incluidos en la tarifa de peaje que pagarán los usuarios por transitar esta vía.
El costo inicial por recorrer toda la carretera será de ¢1.930 por sentido, distribuidos en cuatro estaciones de cobro. El monto será ajustado cada tres meses de acuerdo con la inflación, según dispone el contrato.
Los servicios de valor agregado que se ofrecerán en la ruta a Caldera tienen dos propósitos: ayudar al usuario en problemas a despejar la vía de forma rápida, y a la vez evitar molestias al resto de los conductores, explicó Cristian Sandoval, gerente general de Autopistas del Sol, empresa a cargo del proyecto vial.
Otra ventaja de la nueva ruta es que en caso de tener una necesidad fisiológica, le ofrecerá al usuario servicios sanitarios en algunos tramos del camino y, para más adelante, está contemplada la construcción de restaurantes, tienda de conveniencia y gasolinera, que serán operadas por la empresa a cargo de la obra.
La seguridad al conducir es otro punto a favor de la moderna vía, tanto por el mayor agarre que tendrán los autos debido a los materiales utilizados, como por el relieve bastante plano y la poca presencia de curvas cerradas que contempla el diseño.
También en seguridad, pero ciudadana, el sistema de cámaras —que se colocará una cada 1,3 kilómetros permitirá combatir robos, junto con las lámparas de iluminación que se colocarán en la sección entre San José y Ciudad Colón y en las intersecciones que se construirán en el resto del camino.
El cobro automático de peaje es otro punto alto de la nueva vía, ya que permite al conductor ahorrarse 1 minuto con 25 segundos en el pago de la tarifa, lo que se traduce en cinco minutos a lo largo de todo el trayecto a Caldera, tomando en cuenta que contará con cuatro estaciones.
En cuanto al ahorro de tiempo, los cálculos preliminares apuntan a que viajar a Caldera por la nueva carretera significará entre una o una hora y media más rápido que hacerlo por las rutas alternas que son el Monte del Aguacate o Cambronero.
Para el usuario, el ahorro en el tiempo de recorrido le significará unos cuatro litros de gasolina menos por sentido, según estimaciones preliminares realizadas por Autopistas del Sol.
Sin embargo, hay elementos negativos del proyecto, como el hecho de que en el nuevo tramo de la carretera —entre Ciudad Colón y Orotina— contará con 19 kilómetros que tendrán solo un carril por sentido, lo que genera la desilusión de que se supere pronto su capacidad.
El temor de un pronta saturación fue descartada por la empresa a cargo del proyecto, pues Sandoval aseguró que el tránsito promedio diario esperado está muy por debajo de la capacidad que tendrá la vía.
La capacidad máxima de cada carril es de 1.600 vehículos que circularían a una velocidad de 40 kilómetros por hora, pero el tránsito promedio que se espera es de 5 mil autos por día, detalló Sandoval.
El acto de inauguración del último tramo pendiente del nuevo camino, entre Ciudad Colón y Orotina, se dará este miércoles al mediodía a la altura de Escobal, Atenas.
Para poder transitar hacia Caldera por una carretera, los costarricenses debieron esperar más de tres décadas. Este proyecto fue el primero que se desarrolló mediante la figura de concesión de obra pública.
Caldera será la primera carretera moderna del país
• Recorrer los 77 kilómetros que mide la moderna vía costará ¢1.930
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La nueva carretera a Caldera, que se pondrá en operación en su totalidad este miércoles, será el primer proyecto vial de Primer Mundo que tendrá el país.
La ventaja de una vía moderna con respecto a una tradicional, es que la primera atenúa a los usuarios los dolores de cabeza que producen situaciones tan acongojantes como la de quedarse varado en medio recorrido.
Lo anterior porque inmediatamente que un conductor reporte ante la empresa que operará la carretera que su auto sufrió un desperfecto mecánico, recibirá el auxilio de una unidad de asistencia que estará disponible las 24 horas, los 365 días del año.
Incluso la ayuda podría llegarle de forma ágil aun si no tiene un teléfono móvil para solicitar apoyo, pues un sistema de vigilancia que contará con 47 cámaras a lo largo del camino registraría el vehículo varado, lo que le permitirá a la administración del camino aplicar el protocolo de asistencia.
En caso de que los técnicos de apoyo consideren que el daño del auto es mayor, entonces solicitarán una grúa para trasladar el vehículo hacia un sitio seguro mientras el conductor llama su propia grúa o a su mecánico.
De sufrir un accidente de tránsito o un quebranto de salud, el usuario de la nueva ruta dispondrá además de una ambulancia con paramédicos que dará soporte básico mientras llegan las unidades de emergencia estatales.
Algo muy importante es que el costo de estos servicios de valor agregado que se ofrecerán en el nuevo camino están incluidos en la tarifa de peaje que pagarán los usuarios por transitar esta vía.
El costo inicial por recorrer toda la carretera será de ¢1.930 por sentido, distribuidos en cuatro estaciones de cobro. El monto será ajustado cada tres meses de acuerdo con la inflación, según dispone el contrato.
Los servicios de valor agregado que se ofrecerán en la ruta a Caldera tienen dos propósitos: ayudar al usuario en problemas a despejar la vía de forma rápida, y a la vez evitar molestias al resto de los conductores, explicó Cristian Sandoval, gerente general de Autopistas del Sol, empresa a cargo del proyecto vial.
Otra ventaja de la nueva ruta es que en caso de tener una necesidad fisiológica, le ofrecerá al usuario servicios sanitarios en algunos tramos del camino y, para más adelante, está contemplada la construcción de restaurantes, tienda de conveniencia y gasolinera, que serán operadas por la empresa a cargo de la obra.
La seguridad al conducir es otro punto a favor de la moderna vía, tanto por el mayor agarre que tendrán los autos debido a los materiales utilizados, como por el relieve bastante plano y la poca presencia de curvas cerradas que contempla el diseño.
También en seguridad, pero ciudadana, el sistema de cámaras —que se colocará una cada 1,3 kilómetros permitirá combatir robos, junto con las lámparas de iluminación que se colocarán en la sección entre San José y Ciudad Colón y en las intersecciones que se construirán en el resto del camino.
El cobro automático de peaje es otro punto alto de la nueva vía, ya que permite al conductor ahorrarse 1 minuto con 25 segundos en el pago de la tarifa, lo que se traduce en cinco minutos a lo largo de todo el trayecto a Caldera, tomando en cuenta que contará con cuatro estaciones.
En cuanto al ahorro de tiempo, los cálculos preliminares apuntan a que viajar a Caldera por la nueva carretera significará entre una o una hora y media más rápido que hacerlo por las rutas alternas que son el Monte del Aguacate o Cambronero.
Para el usuario, el ahorro en el tiempo de recorrido le significará unos cuatro litros de gasolina menos por sentido, según estimaciones preliminares realizadas por Autopistas del Sol.
Sin embargo, hay elementos negativos del proyecto, como el hecho de que en el nuevo tramo de la carretera —entre Ciudad Colón y Orotina— contará con 19 kilómetros que tendrán solo un carril por sentido, lo que genera la desilusión de que se supere pronto su capacidad.
El temor de un pronta saturación fue descartada por la empresa a cargo del proyecto, pues Sandoval aseguró que el tránsito promedio diario esperado está muy por debajo de la capacidad que tendrá la vía.
La capacidad máxima de cada carril es de 1.600 vehículos que circularían a una velocidad de 40 kilómetros por hora, pero el tránsito promedio que se espera es de 5 mil autos por día, detalló Sandoval.
El acto de inauguración del último tramo pendiente del nuevo camino, entre Ciudad Colón y Orotina, se dará este miércoles al mediodía a la altura de Escobal, Atenas.
Para poder transitar hacia Caldera por una carretera, los costarricenses debieron esperar más de tres décadas. Este proyecto fue el primero que se desarrolló mediante la figura de concesión de obra pública.