Cocina como profesión
Un aprendizaje certificado o una escuela culinaria bien calificada son esenciales
Jose Salom [email protected] | Viernes 03 agosto, 2018
Hoy en día las artes culinarias nos presentan un campo altamente creativo con una gran seguridad laboral.
En buenos tiempos, el comensal podría preferir “chineos” y aventuras gastronómicas y en tiempos difíciles buscarán opciones más tradicionales, creativas y que cumplan sus expectativas en cuanto a equilibrio y nutrición.
En cualquier caso, siempre hay una demanda.
Hoy todavía es posible desarrollar habilidades de manera informal, entiéndase un pilero sin formación académica ni entrenamiento, que va aprovechando oportunidades que le pueden dar en la cocina tal y como lo hicieron en sus días los chefs clásicos más reconocidos del mundo.
Lea más: ¿Qué hace a un gran chef ser extraordinario?
Pero este es un campo que se ha ido profesionalizando y especializando cada vez más con el paso de los años y el crecimiento de la demanda de formación.
Hoy por hoy los hoteles y restaurantes buscan pasantes de estas escuelas con el principal objetivo de tener un método más de reclutamiento.
Un aprendizaje certificado o una escuela culinaria bien calificada son esenciales y estas deben ir de la mano de una práctica durante la formación y de esto es que se presenta como eje básico un restaurante de aplicación, donde el alumno puede tener durante su formación académica la experiencia que tuvieron esos pileros de antaño que hoy son leyendas de esta profesión.
Lea más: Dime qué comes y te diré quién eres
La clave en esto es que cuanto más real y constante sea esa práctica durante la carrera, más efectiva y útil será en el hotel o restaurante que el alumno elija para graduarse.
Esto es un beneficio tanto para el futuro profesional como para el empleador. Si le sumamos a esto un interés propio de investigación más allá de la academia habrá un interesante porvenir asegurado.
Hay muchas maneras de obtener una educación culinaria. Lo correcto para cada quien depende de sus talentos, objetivos y situación actual.
Uno se debe preguntar: ¿Quiero concentrarme exclusivamente en la cocina? ¿Aprendo mejor haciendo? ¿Me gusta la teoría? ¿Qué tan rápido quiero estar en el lugar de trabajo?