Costa Rica necesita un restaurante de Alta categoría
Santiago Fernández [email protected] | Viernes 11 mayo, 2018
Todo país que tenga una gastronomía respetable tiene al menos uno o varios restaurantes de alta categoría que la respalden.
En Costa Rica tenemos la necesidad de alcanzar una gastronomía del más alto nivel y puedo asegurar que sin enterarnos lo exigimos. Nos hemos convertido en comensales quisquillosos, que nos parece fundamental la estabilidad de las mesas, la calidad de la vajilla y el filo de los cuchillos, la forma en la que un salonero nos comunica el menú y cómo se adapta la cocina al más mínimo detalle de nuestras alergias, requerimientos alimenticios o antojos especiales.
Aprovechando esta declaración —que aseguro están todos de acuerdo conmigo— quisiera que nos preguntemos, ¿qué estamos haciendo para lograr que esto sea, primero que todo, una realidad y, más importante aún, que sea sostenible y perdure en el tiempo?
Nosotros los costarricenses debemos entender la importancia de una reservación y aprender a respetarla. Una mesa vacía por una “agenda equivocada” daña el negocio y limita a otros a disfrutar de aquella experiencia.
Si no cambiamos la práctica constante de llegar tarde, cancelar reservas a último minuto o, peor aún, realizar aquellas solo “por si acaso queremos ir”, difícilmente tendremos negocios que realmente logren cumplir a cabalidad con nuestras expectativas, y poder llevar la gastronomía nacional a niveles que en este momento no podemos siquiera imaginar.
Si queremos poder demandar calidad en servicio debemos igualmente ser respetuosos y conscientes de la responsabilidad que llevamos como comensales, al fin y al cabo una gastronomía está intrínsecamente representada por la cultura de su pueblo.
Santiago Fernández Benedetto
Chef y socio propietario de Restaurante Silvestre
Profesor del Instituto Politécnico Internacional