Economía tica caerá un -5,6% en el 2020, pero se recuperará en el 2021: OCDE
Ronny Gudiño [email protected] | Martes 01 diciembre, 2020 11:53 a. m.
La OCDE lanzó este lunes sus proyecciones finales para este año, así como lo que prevén de años venideros, apuntando a una fuerte caída económica para nuestro país, sin embargo, una recuperación en el 2021.
La caída sería de un .5,6% del PIB en este 2020, pero para el año entrante se alcanzaría un crecimiento de 2%, para en el 2022 afrontar un crecimiento todavía superior del 3,8%.
Lo positivo
La recuperación de la demanda se dará, ya que esto va ligado al levantamiento de medidas restrictivas, llegando a un crecimiento de 4,4% del consumo privado en el 2022.
Que la economía de Estados Unidos repunte será buena noticia para las exportaciones costarricenses, las cuales en implementos médicos son especialmente fuertes; incluso ya viendo un crecimiento de 4,1% en el 2021.
Bono Proteger, y en general los apoyos estatales han actuado de forma óptima; al igual que la reducción de la TPM del Banco Central.
Lea más: Banco Central mantiene decisión en cuanto a tasas por poco consumo del tico
"Las autoridades han aumentado adecuadamente el gasto en salud y protección social, luego de haber suspendido la regla fiscal. Asegurar que el gasto social llegue principalmente a quienes más lo necesitan respaldaría los ingresos, reduciría la pobreza y aumentaría la eficiencia del gasto. La reducción de las exenciones fiscales regresivas podría ayudar a aumentar los ingresos. Reducir la carga administrativa para iniciar y formalizar negocios aumentaría la inversión y la creación de empleo formal", mencionan.
Tras un segundo semestre con un crecimiento continúo de casos, en las primeras semanas de noviembre hay una baja tanto en muertes como contagios de Covid-19.
Apertura de fronteras y de comercios, ayudan a dinamizar la economía.
Lo negativo
Todavía en este 2020 no se verá una recuperación del consumo en cuanto siga el alto desempleo, ya que incide tanto en ingresos como consumo.
Genera gran preocupación el crecimiento de la deuda, que parece tornarse cada vez mayor, superando el 80% en años próximos; sin dejar de lado el pago de intereses.
"Debido a que las necesidades de financiamiento soberano serán del 15,7% del PIB en 2021 y la alta incertidumbre sobre la estrategia fiscal, los riesgos de estrés financiero a corto plazo han aumentado", afirman.
El déficit fiscal, por su parte, alcanzará un 9,5% del PIB; alineado a un estancamiento político que da al traste con pocas modificaciones de índoles fiscal, baja confianza de la sociedad e inversionistas, y otros riesgos.
Medidas de confinamiento ocasionaron estragos en actividades como hoteles y restaurantes, construcción y transporte; con influencia negativa en todas las industrias, los bloqueos experimentados.
Proyecciones para el 2020 (en %)
- Caída económica: -5,6
- Consumo privado: -6,8
- Demanda doméstica: -5
- Exportaciones: -14,3
- Importaciones: -10
Lea más: Costa Rica es el país que ha recurrido a más medidas económicas durante la crisis
Conclusiones
En este caso, la OCDE analiza oportunidades y áreas de acción primordiales; fortalecer el sistema de salud y orientar el apoyo fiscal a los más afectados por la recesión, es un ejemplo de lo que debe mantenerse a corto plazo.
Eliminar las exenciones fiscales regresivas y mejorar la eficiencia del gasto público, incluso a través de una reforma del empleo público, podría proporcionar más espacio fiscal y sentar las bases para una estrategia fiscal a mediano plazo que coloque la deuda pública en una senda sostenible, consideran. Continuar con la implementación de reformas estructurales, como las que apuntan a fortalecer la competencia interna, es clave para apoyar la creación de empleo formal, lo que ligan con una estrategia integral para reducir la informalidad.
Esto incluso mediante la reducción de las contribuciones a la seguridad social para los trabajadores con salarios bajos y la construcción de una red de seguridad social para todos los trabajadores, combinada con mejoras en la calidad de la educación y la capacitación, que, según ellos, haría que el crecimiento fuera más inclusivo.
Continuar desarrollando capacidades de rastreo y prueba en todo el país ayudaría a reducir los riesgos de nuevos brotes de virus, es su último apunte.