UNED da acompañamiento en el aprendizaje
Granjas de insectos... una innovadora forma de emprender
Costa Rica Insect Company, la UNED y socios estratégicos buscan productores de insectos para crear emprendimientos con un impacto positivo en la sociedad y el ambiente
Redacción La República [email protected] | Martes 07 julio, 2020
CRIC es una empresa que se propone crear encadenamientos productivos con mujeres
jefas de hogar en zonas rurales, a partir de la instalación de granjas de insectos para procesar proteína con bajo impacto ambiental.
En esta tarea, reciben el acompañamiento académico de la UNED, en el desarrollo de objetos de aprendizaje para la capacitación de quienes desean sumarse a este emprendimiento social.
Esta innovadora empresa, ubicada en Cartago, busca ampliar su red de socios en el país apoyando especialmente a mujeres que requieren generar ingresos para hacerle frente al hogar, promoviendo a su vez la conservación ambiental.
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Para ello, lanzaron recientemente el Programa Nacional de Socios Productores de Insectos, junto a socios estratégicos.
“Yo soy una mujer muy innovadora, por eso no tengo miedo de esto. Uno tiene que tratar cosas nuevas y si se cae se levanta y aprende”, comentó María Vitalina Aguilar, quien forma parte del proyecto, como socio productora.
En este consorcio creado por CRIC participan el Observatorio de Mipymes (OMiPYME+) de la UNED, Fundecooperación e Impact Hub San José.
El objetivo es extender el programa a escala nacional mediante la innovadora actividad de invernaderos para la crianza de los insectos, que son posteriormente comprados por la empresa, comentó Alejandro Ortega, quien con Daniela Arias son fundadores de CRIC.
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Actualmente se encuentran dentro del plan piloto con alrededor de 50 socios productores en lista de espera, indicó Ortega.
Asimismo, buscan también personas interesadas en sumarse a la iniciativa para la recolección y otros procesos de logística.
Lizette Brenes Bonilla, líder de OMiPYME+, destacó el modelo de emprendimiento sostenible, al agregar que “CRIC cuenta con un componente económico, social y ambiental relacionado con producir proteína de bajo impacto en el ambiente. Además, la forma en que la empresa crece, tiene un aporte social importante, lo que la hace estar dentro del modelo de economía circular, sostenible”.
Explicó que “parte de la misión de OMiPYME en este proceso es acompañar en el desarrollo de objetos de aprendizaje para emprendedores y sistematizar la experiencia como un emprendimiento social”.
En esta etapa, se instalarán también fincas demostrativas para la capacitación de socios productores de insectos.
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