Lavado enfrenta al Banco Central con defensas bajas
Wilmer Murillo [email protected] | Miércoles 27 mayo, 2009
Sistema electrónico Central Directo requerirá someterse a leyes internas para cerrar portillos
Lavado enfrenta al Banco Central con defensas bajas
Ente emisor negocia con Instituto contra las Drogas para incluir mayores controles sobre transacciones
A pesar de que los clientes bancarios y las mismas entidades deben someterse a rigurosos controles contra el lavado de dinero, el Banco Central mantiene un portillo que deberá corregir.
Se trata del sistema Central Directo, un esquema electrónico que la autoridad utiliza como un canal de transmisión de su política monetaria y para influir más en las tasas de interés.
Se estima que al menos 40 empresas y 290 personas invierten su dinero en Central Directo, un número que tiende a aumentar rápidamente desde el 18 de marzo anterior, cuando se decretó que el mínimo de inversión para depósitos electrónicos es de ¢100 mil.
Además, el sector público, entidades financieras y asociaciones solidaristas pueden colocar sus fondos en el sistema electrónico.
Ante ello, Central Directo ha desatado la furia de intermediarios no solo porque lo ven como una competencia, al rebasar al sistema bancario con tasas que superan las que este ofrece para cuentas de ahorro y corrientes, sino también porque consideran que no se somete a las regulaciones contra el lavado.
Al respecto la comunidad financiera demanda que el Banco Central se someta a la normativa contra el lavado, pues algunos piensan que podría abrir las puertas para convertirse en legitimador de capitales de dudosa procedencia.
“Aunque les damos seguimiento a las operaciones, podría ocurrir que alguien junte dinero en diferentes bancos y lo deposite como una sola suma en el Banco Central”, comentó Francisco de Paula Gutiérrez, presidente del ente emisor.
El Central ya inició conversaciones con el Instituto Costarricense contra las Drogas (ICD) para incluir una plataforma “conozca al cliente” dentro de Central Directo.
“Estamos ejecutando un proyecto para ponerlo en marcha en agosto para dar cumplimiento a la normativa de prevención del lavado y legitimación de capitales. Es importante que todos los participantes en la captación de recursos se sometan a esos controles. En el caso del Central Directo, nosotros mismos podríamos ser sorprendidos”, dijo por su parte Roy Gutiérrez, gerente general del ente emisor.
La normativa a la cual se sometería el Banco fue elaborada para detectar operaciones sospechosas y fue planteada por el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif).
Con la reforma, la banca está recurriendo a fuentes adicionales de información sobre sus clientes, a fin de poder identificar el origen y monto de sus ingresos.
Wilmer Murillo
[email protected]
Lavado enfrenta al Banco Central con defensas bajas
Ente emisor negocia con Instituto contra las Drogas para incluir mayores controles sobre transacciones
A pesar de que los clientes bancarios y las mismas entidades deben someterse a rigurosos controles contra el lavado de dinero, el Banco Central mantiene un portillo que deberá corregir.
Se trata del sistema Central Directo, un esquema electrónico que la autoridad utiliza como un canal de transmisión de su política monetaria y para influir más en las tasas de interés.
Se estima que al menos 40 empresas y 290 personas invierten su dinero en Central Directo, un número que tiende a aumentar rápidamente desde el 18 de marzo anterior, cuando se decretó que el mínimo de inversión para depósitos electrónicos es de ¢100 mil.
Además, el sector público, entidades financieras y asociaciones solidaristas pueden colocar sus fondos en el sistema electrónico.
Ante ello, Central Directo ha desatado la furia de intermediarios no solo porque lo ven como una competencia, al rebasar al sistema bancario con tasas que superan las que este ofrece para cuentas de ahorro y corrientes, sino también porque consideran que no se somete a las regulaciones contra el lavado.
Al respecto la comunidad financiera demanda que el Banco Central se someta a la normativa contra el lavado, pues algunos piensan que podría abrir las puertas para convertirse en legitimador de capitales de dudosa procedencia.
“Aunque les damos seguimiento a las operaciones, podría ocurrir que alguien junte dinero en diferentes bancos y lo deposite como una sola suma en el Banco Central”, comentó Francisco de Paula Gutiérrez, presidente del ente emisor.
El Central ya inició conversaciones con el Instituto Costarricense contra las Drogas (ICD) para incluir una plataforma “conozca al cliente” dentro de Central Directo.
“Estamos ejecutando un proyecto para ponerlo en marcha en agosto para dar cumplimiento a la normativa de prevención del lavado y legitimación de capitales. Es importante que todos los participantes en la captación de recursos se sometan a esos controles. En el caso del Central Directo, nosotros mismos podríamos ser sorprendidos”, dijo por su parte Roy Gutiérrez, gerente general del ente emisor.
La normativa a la cual se sometería el Banco fue elaborada para detectar operaciones sospechosas y fue planteada por el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif).
Con la reforma, la banca está recurriendo a fuentes adicionales de información sobre sus clientes, a fin de poder identificar el origen y monto de sus ingresos.
Wilmer Murillo
[email protected]