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NOTA DE TANO


Nota de Tano

Gaetano Pandolfo [email protected] | Viernes 05 mayo, 2017

Gaetano Pandolfo

Los tiros de esquina provocan batallas campales

No sé si tengo pésima memoria, pero me da la impresión de que cuando era “carajillo” y todavía de adolescente, no presenciaba en los estadios o no se producían a la hora de que se cobraban tiros de esquina o tiros libres, esas escenas tan desagradables y tan comunes de observar a los defensores y a los atacantes de cada uno de los equipos, agarrándose, abrazándose, empujándose, golpeándose, “jalándose”, codeándose, unos para evitar los remates y los otros para conseguirlos.

Sinceramente no recuerdo haber visto a Mario “Catato” Cordero, a León Alvarado, a “Tazo” Jiménez, a Rey Orozco, al Pistón Velázquez, a Vivo Quesada y a tantos y tantos defensores de las décadas 50-60, hechos una maleta o un rollo con los delanteros de la época, para evitar las anotaciones.

No digo que estas escenas no se dieran; digo que no las recuerdo y me parece que es la televisión a inicios de la década de los 70, que pone a la vista de millones de espectadores estas desagradables acciones.

En el fútbol actual, las áreas defensivas se convierten en verdaderos campos de batalla, cuando se espera el balón proveniente de un tiro de esquina o tiro libre, detalle que empobrece el espectáculo. Es más, lo denigra.

No sé qué acciones puede tomar la FIFA para terminar con este tumor maligno que mata la decencia en el fútbol, porque se da otro agravante.

Si los árbitros de fútbol en todo el mundo, pitaran penal en cada acción de estas, habría que señalar más de ocho o diez por partido.

Los árbitros se hacen los “majes”, porque ven los empujones, los “jalonazos” de camisetas y abrazos que se desearan un par de enamorados entre los jugadores, dentro de la zona caliente y pocos pitan la falta.

Y pongo un ejemplo actual.

La jugada que Keylor Herrera pitó como penal, cuando Keyner Brown le “jaló” el uniforme a Heiner Mora y que provocó después el zafarrancho en el Saprissa, mínimo se presentó unas siete veces en los juegos entre Real Madrid y Atlético y Mónaco con Juventus y los árbitros no se animaron a pitar los penales, a menos que en Europa se juegue con un reglamento diferente.

Estos combates tan desagradables en las áreas de los equipos o se castigan todos con penal, o se dan expulsiones masivas que sirvan de alerta a los protagonistas o que la FIFA permita estas acciones reformando el reglamento.


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