Tipo de cambio y tasas de interés se movieron al alza
Radiografía de 2018, sirve para tomar decisiones económicas en 2019
Banco Central logró su meta de inflación y seguirá siendo su principal objetivo
Fabio Parreaguirre [email protected] | Lunes 07 enero, 2019
La economía costarricense en 2018 estuvo desacelerada, llena de incertidumbre en cuanto a decisiones de impulso económico y con volatilidades al alza en tipo de cambio y tasas de interés, lo que debe servir de análisis para este inicio de año.
Lo positivo es que con la aprobación del paquete fiscal empiezan a aclararse los nublados del día, pero la situación en 2019 está llena de retos, y todavía algunas volatilidades para las que debemos estar preparados.
Hay que esperar qué dirá el Banco Central con el Programa Macroeconómico 2019-2020 que presentará antes de que acabe este mes.
Analizar lo que sucedió el año pasado nos puede ayudar a estar preparados y tomar mejores decisiones económicas este año.
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Incertidumbre fue la tónica, pero debería ir desapareciendo
La incertidumbre se inició hace varios años por las dificultades en tomar acuerdos respecto a la solución del déficit fiscal, con esto se fue deteriorando la confianza en la economía nacional y las decisiones en inversiones.
Hace un año exacto se intensificó con el proceso electoral que se extendió hasta abril, y que dejó sin decisión fija respecto a este campo hasta la última semana de noviembre pasado.
Esto hizo que el gobierno tuviera grandes presiones de liquidez, teniendo que financiarse incluso a tasas mucho más altas a las referidas en las curvas de rendimientos en varias partes del año.
Esa misma incertidumbre hizo que el tipo de cambio se moviera hacia arriba, primero por culpa de Hacienda que necesitó más dólares de la cuenta para pagar sus compromisos con acreedores y luego la impaciencia de muchos agentes que decidieron dolarizar sus ahorros o incluso sacarlos del país.
El clima de incertidumbre fiscal, los factores externos antes mencionados y, a partir de setiembre, la huelga en el sector público en contra del plan fiscal, resultaron en la posposición de decisiones de inversión y consumo.
Consecuentemente esto trajo una desaceleración económica, con la exigencia de mayores tasas de interés sobre la deuda del Gobierno, en una relativa dolarización del ahorro financiero y una marcada desaceleración en la colocación de crédito en el sector privado, indicó el Banco Central en un comunicado.
Efectos que vinieron de afuera
Varios elementos externos tendieron a afectar el desempeño de la economía costarricense, indicó el Banco Central en un comentario de la economía nacional en 2018.
Primero, el proceso gradual de normalización de la política monetaria en naciones avanzadas.
Segundo, el incremento en los precios de materias primas, principalmente de hidrocarburos y que, en buena medida, explicó el deterioro de cerca de un 3% en los términos de intercambio del país.
Tercero, la disputa comercial entre China y Estados Unidos, que introdujo tensiones en los mercados financieros internacionales.
Cuarto, la situación política y social en Nicaragua, que ha tenido un efecto negativo sobre el intercambio comercial de Costa Rica con el resto de la región centroamericana.
Fuente: Tomado del comentario del BCCR sobre la economía costarricense 2018
Indicadores de la economía costarricense 2018
Así se movieron los diferentes indicadores macroeconómicos el año pasado
- Inflación
Se ha mantenido baja y estable, ha estado contenida dentro del rango meta del Banco Central (del 2% al 4%).
En noviembre la inflación general, fue del 2,3% (en términos interanuales del Índice de Precios al Consumidor).
Por su parte, la inflación subyacente, variable que refleja de mejor manera las presiones inflacionarias de demanda, se ubicó en un 2,1% ese mes.
La información disponible a la fecha hace prever que la inflación general será cercana al 2% al cierre de 2018.
- Crecimiento económico
Medido por la variación interanual de la tendencia ciclo del producto interno bruto (PIB), se desaceleró en 2018, y registró al tercer trimestre una tasa del 2,1% (3,2% en igual lapso de 2017 y 2,8% como tasa media de los dos trimestres previos).
Según componentes del gasto, la desaceleración estuvo presente tanto en el consumo de los hogares como del Gobierno general, cuyos efectos fueron en parte compensados por el incremento en la demanda externa de bienes, particularmente de dispositivos médicos.
La evolución del consumo de los hogares es coherente con el deterioro en la confianza del consumidor, el menor crecimiento del crédito al sector privado y la caída en los términos de intercambio, que directamente afectan el ingreso disponible de los hogares.
- Tipo de cambio
Se identifican tres episodios a lo largo del año.
Un primer semestre con relativa estabilidad
Entre julio y noviembre hubo presiones al alza en el tipo de cambio, en parte explicadas por un mercado privado estacionalmente menos superavitario, cuyo efecto fue reforzado por mayores requerimientos del SPNB y una relativa dolarización del ahorro financiero exacerbada por la incertidumbre en materia fiscal.
Para diciembre el mercado cambiario mostró menor tensión, las expectativas de variación cambiaria corrigieron a la baja y el Banco Central pudo restituir en el mercado cambiario parte de las divisas vendidas al SPNB en meses previos.