Recortes en la Caja afectan al asegurado
Gabriela Masis [email protected] | Lunes 06 junio, 2011
Entidad aplica un plan de austeridad con el que busca reducir ¢30 mil millones en gastos
Recortes en la Caja afectan al asegurado
Los asegurados enfrentan distintos problemas, la falta de especialistas y de medicamentos
Primeros días de junio, “queremos la clínica que teníamos”, reclaman a voces los vecinos de Tibás y zonas circundantes.
Mayo, los médicos del Hospital Escalante Pradilla critican la reducción de horarios y a kilómetros de distancia, en el Centro Nacional de Rehabilitación, los pacientes deben esperar más tiempo por la falta de personal.
O bien, la falta de medicamentos o de reactivos e inclusive de alcohol son algunas de las historias que se repiten diariamente.
Estas son consecuencias del recorte en los gastos aplicado por la Caja Costarricense de Seguro Social, para los afectados.
El plan para el uso racional de los recursos pretende bajar este año los gastos en ¢30 mil millones.
Sin embargo, la institución debe salir a buscar ¢85 mil millones para compensar los gastos, ya que los ingresos van a aumentar en un 9,4% mientras los egresos un 13%.
Por otra parte, el reacomodo en las horas de consulta externa de las clínicas de Pérez Zeledón y en San Rafael de Heredia hizo colapsar las unidades de emergencia.
El posible cierre de servicios de la Clínica Rodrigo Fournier en Tibás implicará engrosar las filas del Hospital México, dijo Inés Corrales, secretaria del Sindicato de Asistentes de Servicios de Salud.
Mientras, la morosidad de los patronos y principalmente la del Estado, en el pago de cuotas obrero patronales alcanza los ¢700 mil millones, de acuerdo con los últimos reportes contables.
La política de contención del gasto responde a recomendaciones hechas por la Auditoría Interna sobre el comportamiento de los gastos.
El acatamiento a dichas sugerencias condujo, entre otras medidas, al retiro de beneficios a los médicos especialistas destacados en zonas rurales.
Como resultado se eliminaría la adjudicación de vivienda y el pago de viáticos para quienes están fuera del área metropolitana.
“Hay buenos médicos y disposición por hacer bien las cosas, pero decisiones como estas desmotivan”, argumentó Alexis Castillo, presidente del Colegio de Médicos.
Otro ejemplo es la situación presentada en el servicio de ginecología del Hospital Calderón Guardia, que presenta insuficiencia de especialistas, situación detectada por la Defensoría de los Habitantes.
Como parte de las políticas presupuestarias, la Caja decidió actuar en dos vertientes, una en el uso racional de los recursos y, otra, limitar el crecimiento de los gastos por servicios personales.
Quienes están a cargo de la dirección deberían recortar gastos superfluos y dar un uso racional a los presupuestos sin sacrificar la atención al asegurado, dijo Castillo al criticar el pego de consultorías externas.
Gabriela Masís
[email protected]
Recortes en la Caja afectan al asegurado
Los asegurados enfrentan distintos problemas, la falta de especialistas y de medicamentos
Mayo, los médicos del Hospital Escalante Pradilla critican la reducción de horarios y a kilómetros de distancia, en el Centro Nacional de Rehabilitación, los pacientes deben esperar más tiempo por la falta de personal.
O bien, la falta de medicamentos o de reactivos e inclusive de alcohol son algunas de las historias que se repiten diariamente.
Estas son consecuencias del recorte en los gastos aplicado por la Caja Costarricense de Seguro Social, para los afectados.
El plan para el uso racional de los recursos pretende bajar este año los gastos en ¢30 mil millones.
Sin embargo, la institución debe salir a buscar ¢85 mil millones para compensar los gastos, ya que los ingresos van a aumentar en un 9,4% mientras los egresos un 13%.
Por otra parte, el reacomodo en las horas de consulta externa de las clínicas de Pérez Zeledón y en San Rafael de Heredia hizo colapsar las unidades de emergencia.
El posible cierre de servicios de la Clínica Rodrigo Fournier en Tibás implicará engrosar las filas del Hospital México, dijo Inés Corrales, secretaria del Sindicato de Asistentes de Servicios de Salud.
Mientras, la morosidad de los patronos y principalmente la del Estado, en el pago de cuotas obrero patronales alcanza los ¢700 mil millones, de acuerdo con los últimos reportes contables.
La política de contención del gasto responde a recomendaciones hechas por la Auditoría Interna sobre el comportamiento de los gastos.
El acatamiento a dichas sugerencias condujo, entre otras medidas, al retiro de beneficios a los médicos especialistas destacados en zonas rurales.
Como resultado se eliminaría la adjudicación de vivienda y el pago de viáticos para quienes están fuera del área metropolitana.
“Hay buenos médicos y disposición por hacer bien las cosas, pero decisiones como estas desmotivan”, argumentó Alexis Castillo, presidente del Colegio de Médicos.
Otro ejemplo es la situación presentada en el servicio de ginecología del Hospital Calderón Guardia, que presenta insuficiencia de especialistas, situación detectada por la Defensoría de los Habitantes.
Como parte de las políticas presupuestarias, la Caja decidió actuar en dos vertientes, una en el uso racional de los recursos y, otra, limitar el crecimiento de los gastos por servicios personales.
Quienes están a cargo de la dirección deberían recortar gastos superfluos y dar un uso racional a los presupuestos sin sacrificar la atención al asegurado, dijo Castillo al criticar el pego de consultorías externas.
Gabriela Masís
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