Nos descalificaron, ¿ahora qué?
Miguel Angel Rodríguez [email protected] | Lunes 22 septiembre, 2014

La deuda pública ha ido creciendo sin que a la par crezcan los aportes del estado al aparato productivo
Disyuntivas
Nos descalificaron, ¿ahora qué?
Lo que tenía que pasar pasó y perdimos la calificación de grado inversión. La consecuencia es sencilla y grave: el gobierno y los privados deberán gastar más en intereses en nuevos financiamientos internacionales, y también subirán los intereses locales.
Eso significa menos recursos sanos para el resto del gasto público, y con intereses mayores, se encarecerán a las familias sus créditos de vivienda y otros, y al sector productivo sus inversiones. Tendremos menos generación de empleo y una menor capacidad para producir y consumir bienes públicos y privados.
Es evidente la urgencia de resolver nuestro desequilibrio fiscal. En los últimos años ha crecido el gasto corriente más que los ingresos tributarios, y no hemos podido aumentar la inversión.
Por eso la deuda pública ha ido creciendo sin que a la par crezcan los aportes del estado al aparato productivo. El incremento de esa deuda nos vuelve deudores más riesgosos.
Tarde o temprano el ajuste se producirá. Podemos realizar el ajuste conscientemente, tomando las medidas para minimizar su costo sobre las familias más pobres y sobre nuestro crecimiento.
O el ajuste se producirá por medio de una crisis de pagos con enorme dolor y costo para la sociedad, o bien con una mayor contracción de la inversión, afectando el ya insuficiente crecimiento.
Para actuar conforme a un plan voluntario debemos ser capaces de generar un acuerdo social y político, lo que no será fácil ante la pérdida del bipartidismo y la vehemencia con que se expresan los intereses sectoriales. Pero es necesario y todos, cada uno desde nuestras propias circunstancias, debemos trabajar para lograrlo.
Hay acciones que deben ser ejecutadas todos los días por los entes públicos, pues son parte esencial de una buena administración. Ellas no son glamorosas ni ganan grandes méritos políticos o históricos. Más bien son generalmente impopulares. Pero son indispensables.
La primera, como en toda familia, es el control del gasto. Es conducta indispensable que nunca termina. Pero adquiere especial relevancia durante la preparación y aprobación del presupuesto.
También son obligaciones cotidianas las de promover la eficiencia en la administración pública y mejorar el cobro de los impuestos. Son tareas impracticables mediante un único acto heroico. Sus beneficios solo se reciben gradualmente y exigen atención constante a los detalles. Pero de tanto en tanto se necesitan transformaciones institucionales para facilitarlas.
Todas estas acciones de ejercicio permanentes dependen de especial manera de las autoridades del Poder Ejecutivo.
Frente al problema fiscal y la necesidad de inversión pública esas acciones ya no son suficientes.
Se requiere además proveer nuevos ingresos fiscales y realizar importantes cambios para que sea posible incrementar la inversión en infraestructura. Para ello es preciso contar con la buena voluntad de los distintos partidos representados en la Asamblea Legislativa y de los diversos grupos de interés sectorial.
Esto pone a prueba la solidez de nuestro sistema republicano que no lo ha logrado en los últimos años.
Comprometámonos.
Miguel Ángel Rodríguez
NOTAS ANTERIORES

Marzo mes de la historia de la mujer y de sus luchas
Viernes 14 marzo, 2025
Si en verdad deseamos honrar a la mujer y hacer nuestras sus luchas, el lema debería transformarse para que se convierta en un “leitmotiv” para toda la especie

Trascendencia del verdadero ejercicio democrático
Viernes 14 marzo, 2025
Se han refinado armas de destrucción política, se han depurado tácticas en las que el populismo usa personas y argumentos para acabar con sus adversarios...

Trump 2.0: Paz en Ucrania, aranceles y la motosierra de Elon Musk
Jueves 13 marzo, 2025
Política de paz en Ucrania, montaña rusa de aranceles y motosierra resumen los dos primeros meses de la administración Trump 2.0.

La sombra del bipartidismo
Miércoles 12 marzo, 2025
De los 25 nacionales solo uno ganó la presidencial, el Partido Progreso Social Democrático que era, en ese momento, un partido nuevo en las elecciones. De los 2